Es importante mantenerse al día con las disposiciones legales para cumplir con los procedimientos fiscales. Esto otorga transparencia y credibilidad a la gestión empresarial. Por esto, es esencial contar con un sistema de facturación electrónica.
En el sano desarrollo de la empresa es imprescindible contar pilares como:
– La cantidad de trabajadores necesarios para lleva a cabo todas las tareas.
– Incrementar la producción.
– Los recursos materiales y financieros.
– La cartera de clientes, entre muchos otros factores.
Pero hay que destacar un aspecto fundamental para que todo esto pueda suceder en el marco de la ley: cumplir con el reglamento fiscal del país donde se encuentra con un sistema de facturación electrónica.
Como resultado de los cambios tecnológicos de las últimas décadas, las instituciones públicas encargadas de velar por el cumplimiento de la ley en esta área, también han buscado fomentar el uso de herramientas innovadoras. Sobre todo para facilitar los procesos a través de sistemas de facturación electrónica.
En el caso de Argentina, la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) es el ente regulador de las políticas tributarias, aduaneras y de recaudación para fondos de seguridad social.
El organismo define a la factura electrónica de la siguiente manera:
“Un comprobante digital funcional y legalmente equivalente a la factura en formato papel, que la reemplaza en la mayoría de las operaciones de quienes estén obligados u opten por su utilización”. (http://www.afip.gob.ar/fe/informacionGeneral.asp).
Considera además, que la facturación electrónica permite la gestión de los datos sin necesidad de estar impresos. Esto permite la posibilidad de compartirlos a través de una PC, tablet o teléfono inteligente.
Entonces, las empresas deben responder a los nuevos criterios institucionales con un sistema de facturación electrónico óptimo y eficaz. De esta forma evitarás posibles inconvenientes al mantener al día tus gestiones diarias.
Sistema de facturación electrónica: aspectos a considerar
– Verificar que la empresa esté al día con toda la documentación legal y fiscal.
– Saber cómo funcionan los plazos de cobro y pago de cuentas. Un análisis detallado de lo que se realiza actualmente en la empresa.
– Contratar un proveedor de software de facturación electrónica que ayude a llevar el control de los documentos tributarios emitidos, recibidos y ordenados sistemáticamente.
– Brindar cursos de formación para el personal de sistemas, finanzas, contabilidad y logística, para que se familiaricen con el software a utilizar.
– Contactar a los clientes y proveedores para informarles sobre el proceso de cambio de factura en papel a digital.
La facturación electrónica otorga grandes beneficios para el desarrollo comercial de la empresa:
– Elimina gastos de impresión y envíos.
– Reduce de errores humanos.
– Provee un acceso más rápido a la información almacenada.
– Minimiza riesgos de fraude fiscal.
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