Conocer el estado real de la mercancía de tu compañía es posible si lográs tener un muy buen control de inventario, el cual debe incluir materias primas, productos semielaborados y productos terminados.
Aunque hay empresas a las que les basta con realizar un control periódico de sus referencias, existen otras que necesitan una gestión del stock mucho más extensa, pues disponen de procesos de producción, mayor rotación de productos y devoluciones de los clientes.
Sea cual sea el caso, el control del inventario representa una actividad clave para lograr mayor rentabilidad. ¿Por qué? El motivo es que las roturas de stock podrían provocar demoras y reclamaciones por parte de los clientes, así como tampoco es deseable que haya un sobrestock, porque acarrea un costo adicional y la mercancía podría quedar obsoleta.
Lo que se busca verdaderamente son dos objetivos básicos: minimizar el costo de almacenaje y prestar un excelente servicio a los clientes; para lograrlos es indispensable contar con herramientas que faciliten y garanticen resultados acertados. En Zoo Logic sabemos la importancia de ambos para vos y para tu negocio, así que te invitamos a seguir leyendo.
Claves para lograr un excelente control de inventario
Apostá siempre por la automatización
Queda claro que realizar el control de inventario de forma manual resulta agotador y el riesgo de error es muy alto. En cambio, un sistema de control de inventarios (como Dragonfish) suprime el papel, agiliza el control y erradica los errores. Este software controla todas las entradas y salidas de los productos, por lo que podés llevar un control íntegro y seguro de los procesos que supera cada artículo.
¿Cómo se hace? A través de una herramienta que cada vez se usa más, se le conoce como PICKING. Hay varios tipos, pero todos tienen más o menos que ver con lo mismo. Consiste en la carga rápida de mercadería con un lector de códigos, en donde, por ejemplo, tenés una caja de 100 artículos, escaneas 1, multiplicás por 100 y listo ¡Te ahorraste un montón de trabajo!
En el caso de Dragonfish, maneja una herramienta que le permite reutilizar los códigos de barra de los proveedores y apropiarlos; así se hace aún más fácil el trabajo, porque no tenés que andar pegando etiquetas nuevas en cada producto.
Mantené un «chequeo» permanente
Cada negocio debe establecer una periodicidad para realizar el control de inventario, aunque ello dependa de factores como el número de productos disponibles, el tamaño del almacén y el número de operarios.
Podés hacerlo de manera periódica (mensual, trimestral, semestral o anual), así como también puede llevarlo a cabo en forma cíclica. Se trata de contar ciertas referencias con más frecuencia que otras, según sus características comunes o rotación. A diferencia del inventario anual o semestral, se garantiza un conocimiento más riguroso de las referencias almacenadas, lo que disminuye el riesgo de roturas de stock.
No obstante, el caso ideal es poder ejercer un control de inventario permanente. Es decir, un inventario actualizado en tiempo real, registrando constantemente todos los movimientos de stock (desde las entradas y salidas hasta los movimientos internos). Esto solo es posible mediante un sistema de gestión como Dragonfish, ya que este sistema realiza de manera automática un seguimiento de los productos que se recepcionan, permanecen y se expiden.
Con un inventario permanente se reducen costos, desaparecen los errores y las interrupciones en la operativa.
Realizá informes de gestión y medí el rendimiento por medio de métricas
Cuando se trata de control de inventario, la evaluación y el análisis son fundamentales. En un área tan compleja como esta — la cual consta de múltiples aristas y procesos — conviene realizar informes de gestión regularmente con el objetivo de comprender la dinámica operativa.
Los informes constantes te permitirán identificar patrones negativos, así como los problemas que deben ser corregidos para reforzar el control y la eficacia.
Junto con realizar informes generales, emplea métricas para medir de manera palpable y cualitativa el desempeño de los procesos, acciones y estrategias orientadas al control de inventario.
Por ejemplo, podés cuantificar las pérdidas que se hayan producido durante un periodo de tiempo determinado, para tener una idea clara de cuán efectivas son las labores de seguimiento.
También, es importante que tengas en cuenta indicadores relacionados con la rotación y cobertura de stock, ya que esto ayuda a evaluar si se dispone regularmente de la cantidad idónea de mercancía para garantizar sólidos flujos comerciales.
Conclusión
El objetivo de hacer un control de inventario no es otro que facilitar las operativas de tu comercio. Una buena organización de la mercancía influye positivamente sobre todas las actividades que se desarrollan en la instalación.
Independientemente de tu tipo de inventario y empresa, la automatización resultará de gran ayuda: gracias a soluciones tecnológicas podrás sistematizar y digitalizar las labores claves de la gestión de inventario.
En general, esta estrategia consiste en migrar el esquema de trabajo a un funcionamiento inteligente, marcado por la precisión y la efectividad; si a ese valioso instrumento le sumás un control permanente, junto a la realización de informes de gestión y la medición del rendimiento por medio de métricas entonces estarás más que encaminado a lograr una mayor rentabilidad. ¡Contactá con el equipo de Dragonfish ahora!
